El sábado 28 de este mes nos visita Daniel Blaufuks en el Museo San Telmo. Esta noticia seguramente pasará desapercibida en la prensa local entre acontecimientos deportivos, el mal tiempo o la resaca de la fiesta de San Sebastián. Permitidme insitir un poco en la presencia del artista luso y su enorme trabajo. Ha publicado ya más de una veintena de libros ( bastantes de ellos que podemos llamar fotolibros, unos pocos se encuentran en la biblioteca del museo), expuesto en innumerables salas internacionales.
Su trabajo, principalmente con fotografía y vídeo y pelicula, nos habla de la conexión entre el tiempo y el espacio. La representación de la memoria, íntima o personal y la memoria pública, es onmipresente en su obra, a menudo acompañada por textos literarios. Así su libro Terezin, (Steidl, 2010), expuesto actualmente en San Telmo dentro de la exposición Indeseables, nos muestra imagenes del campo de concentración de Terezin, campo considerado un «modelo» cuando se creó en 1942, que se transformó pronto en la antesala de Auschwitz y otros campos de exterminio. Blaufuks, de origen judío, viaja varias veces a Terezin, puede que impulsado por la memoria de sus abuelos exiliados a Portugal huyendo de la Alemania nazi, y depués de haber visto una fotografía del campo en el libro Austerlitz, del autor W.G.Sebald. Esa habitación retratada es el punto de inflexión de su trabajo, que agrupa fotografías y documentos de archivo así como una película de propaganda del campo.
Las fotografías de Blaufuks paran el tiempo, lo estiran, lo hacen involvente. Luchan contra el olvido, de manera melancólica, poética y sutíl pero sin cesar. El tiempo, ese compañero de las sombras también aparece como protagonista en el precioso Attempting exhaustion, (Akio Nagasawa 2017). Citando a Perec y su Tentative d’épuisement d’un lieu parisien, Blaufuks fotografía lo que no acontece, lo más cotidiano, el tiempo que pasa en silencio desde la ventana de su cocina. Entra la luz sobre la mesa y con ella de manera imperceptible los acontecimientos de la vida, los recuerdos, los amigos que han venido o se van, las noticias de los periodicos, la memoria de sus abuelos refugiados ante la misma luz.
Ese espacio, reducido y a la vez inagotable e infinito, es el del artista. El que a lo largo de su vida y su trabajo hace que cada momento sea digno de recordar, de no olvidar. Dejo aquí el enlace a una presentación que hizo en 2015:
Este año no ha tocado ir a la fiesta de la fotografía que es París Photo, pero eso no impide que pasen cosas interesantes.
Ha llegado el momento de hacer un balance del año, y aprovechar para publicar una de esas interminables listas de libros favoritos. Pero no antes de resaltar eventos que creo importantes para la colección.
La exposición 3X4 = Orain / Ahora,que hemos podido ver este verano en el museo San Telmo hasta finales de octubre ha supuesto un éxito para la colección. No es fácil exponer fotolibros y no son muchas las exposiciones dedicadas al libro, tanto en España como en el extranjero. El Museo San Telmo apuesta por ello y agradezco mucho la iniciativa. Comisariada por Jon Cazenave con mucho acierto, finura y dedicación, hemos podido ver como viajaba el fin de semana pasado a la gran reunión de la familia fotográfica en Soria, con motivo de la reveindicación/ celebración del Futuro Centro Nacional de Fotografía e Imagen promovido por el ayuntamiento de Soria y la plataforma creada para impulsarlo.
Son muchas y muchos los implicados en este importante evento, no puedo citarles a todas/todos, pero desde aquí les agradezco con mucho afecto e ilusión el haber incluido esta exposición que se podrá ver en la sala del Palacio de la Audencia de Soria hasta finales de enero. Eskerrik asko a todas y todos ellos.
Dicho esto, creo que hay por delante un largo camino que seguir, en Soria como aquí, y continuaremos trabajando en ello con ilusión y empeño.
Sin alargarme más, os dejo aquí una larga lista subjetiva de libros que me han gustado este año. Muchos de ellos están ya en la biblioteca de San Telmo, otros la integrarán en breve. Muchos de ellos hablan de querencia, de perdida y encuentro, de familia, de infancia, de rabia o de melancolía, de poesía, de amor al fin, en diferentes formas. Añado que este año he comprado bastante menos libros que otros años, crisis mediante, pero todos estos son favoritos.
Sin orden particular, y sin más comentarios para que no parezca esto el cuento de Las mil y una noches. Pero no dudéis en preguntar o comentar!
Belleville, de Thomas Boivin, publicado por Stanley Barker.
Faltan algunos libros muy esperados que seguramente estarían en esta lista de haber llegado ya, surgirán de una manera u otra, otros se me habrán escapado, desaparecidos bajo una pila, algunos desgraciadamente no he llegado a comprar. Podría hacer una lista de los deseados…
Me permito añadir a esta lista la publicación / catálogo / periódico de 3X4= ORAIN. La podéis encontrar en PDF en la web de San Telmo aquí o solicitarla por escrito al mail de la biblioteca , bibliosantelmo@donostia.eus.
Comprad libros!!! Comprad si podéis, todos los que podáis, y mejor a libreros independientes, los que dan todo su tiempo y energía por difundir esto que nos reune aquí.
El autor de Nemini Parco (RM 2017), es un fotógrafo silencioso, algo alejado de los circuitos comerciales. Su trabajo, muy personal, está arraigado al entorno rural de sus orígenes, el Alto Maestrazgo.
Maquis es un viaje oscuro en la memoria de la posguerra, la de los maquis, guerrilleros antifranquistas que siguieron luchando en los años 40. Monterde recupera esa historia violenta y dura de manera emocional, sin dar detalles de nombres ni fechas. Fotografiado de noche con flash, Maquis es un trabajo íntimo e intenso, una historia de gritos ahogados bajo la nieve, como el silencio que ha seguido tras los acontecimientos trágicos, encarcelamientos o fusilamientos.
Siguiendo de noche los pasos de los maquis, recorriendo los lugares que atravesaron, donde se escondieron o murieron, Monterde crea una atmósfera que deja poco respiro al lector, preso del miedo y la oscuridad. Maquis es un libro «austero y clandestino», en palabras del propio autor.
Monterde va más lejos y interviene las fotografías, las pinta, las entierra, las cubre con la misma tierra que pisaron sus protagonistas. Las cose con hilo rojo, como si quisiera transmitirnos las cicatrices del pasado, luchando contra el olvido. Escrito a mano en la cubierta con pigmentos naturales, Maquis da cuerpo a la historia y la trae al presente.
Maquis es un libro honesto, sincero y brutal. Un libro emocional , cargado de memoria, de polvo y sangre. Es el trabajo de un autor inclasificable y entrañable, y necesario.
Se inauguró con mucho público el viernes 15 de julio la exposición 3X4=ORAINen la sala Laboratorio del Museo San Telmo. La idea de esta muestra nace con la voluntad de acercar el fotolibro al gran público, dar a conocer de cerca su riqueza y posibilidades narrativas, así como su relevancia en nuestra sociedad actual, tanto por sus temas como por sus carácteristicas y diseño.
Jon Cazenave, comisario de la muestra, propuso 3 temas ejes para la selección de libros dentro de la colección: cine, música y literatura, tres disciplinas con lazos evidentes en la edición de fotolibros. 12 libros se mandaron a 12 autores vascos destacados en estas disciplinas, para que nos compartan su mirada, reflexión o comentario ante la publicación recibida. Muchas o muchos de esos autores poco conocían del fotolibro, o apenas se habían acercado a él. La impresíon que tengo es que este nuevo dialogo nacido entre ellos ha resultado ser una maravillosa experiencia. Desde aquí mi profundo agradecimiento a todas y todos ellos!
18 libros más aparecen en la exposición, siguiendo los mismos ejes, presentados, comentados y fotografiados por el propio Jon Cazenave, que ha realizado un trabajo titanesco con el tiempo y medios impartidos, con la colaboracíon de Alberto Salván de tres tipos graficos, en el diseño gráfico y puesta en espacio.
En la muestra se puede ver también obra en pared, y obra de gran belleza, prestada con generosidad por algunos de los autores de los libros escogidos: De Middel, Barón, Meeks, Clavarino, Keppel, Van der Molen, Ortiz y un vídeo en el caso de la obra Matter/Burn out, de Daisuke Yokota.
Esta es la relación de libros expuestos en la muestra:
Esta selección, como el resto de la colección, es variada e internacional (siempre ganan los japoneses, pero descubro que hay muchos nombres holandeses). En ella se encuentran libros muy recientes y otros ya clásicos, unos bien conocidos y otros por autores quizá menos evidentes, pero no menos pertinentes. No se ha buscado rabiosa actualidad, pero On Abortion de Laia Abril es la prueba de que los fotolibros tratan de temas que son retos del mundo que nos rodea, desgraciadamente en este caso.
Se podrían haber escogido muchos libros, ahora mismo me vienen tantos a la cabeza, que cabrían perfectamente en esta exposición! Ojalá estos, indiscutibles en mi opinion, despierten interés y curiosidad para acercarse a ellos con una mirada nueva. Siempre ha sido mi implicación al depositar la colección en el museo San Telmo la de trabajar por el mayor conocimiento del fotolibro, su estudio en profundidad, su accesibilidad.
Cuando veo la sala Laboratorio, llena de luz, convertida en sala de estudio fluida y clara, de fácil y sutil circulación gracias a su señalítica por colores, pienso que esta exposición, humilde por los medios empleados pero ambiciosa en su concepto y contenido, logra sus expectativas. Quiero dar las gracias a Jon Cazenave por su implicación y dedicación inagotable durante meses para conseguir este resultado, y al Museo San Telmo por hacerlo posible. La muestra estará visible hasta el 30 de octubre, con entrada gratuita. Ojalá pueda circular más adelante para llegar a más gente!
También me hace especial ilusión poder contar con un catálogo de 88 páginas en forma de newsprint, que recoge todos los textos en 4 idiomas (euskera, castellano, francés e inglés) además de información sobre los libros. Ya sabéis de mi amor por el papel, y por que quede huella física de este trabajo…
Para los que no podáis acercaros al museo, se puede descargar la publicación desde su web , aquí.
Habrá visitas guiadas y talleres asociados a la muestra, toda la información en la página web del museo.
Con mucha ilusión espero veros en San Telmo!!!.
In English,
The exhibition 3X4=ORAIN was inaugurated with a large public on Friday, July 15, in the Laboratory room of the San Telmo Museum. The idea of this exhibition was born with the desire to bring the photobook closer to the general public, to make its richness and narrative possibilities known, as well as its relevance in our current society, both for its themes and for its characteristics and design.
Jon Cazenave, curator of the exhibition, proposed 3 core themes for the selection of books within the collection: cinema, music and literature, three disciplines with obvious ties in photobook publishing. 12 books were sent to 12 outstanding Basque authors in these disciplines, so that they can share their views, reflections or comments on the publication received. Many or many of these authors knew little about the photobook, or had barely approached it. The impression I have is that this new dialogue born between them has turned out to be a wonderful experience. From here my deep gratitude to each and all of them!
18 more books appear in the exhibition, following the same axes, presented, commented on and photographed by Jon Cazenave himself, who has carried out a titanic work with the time and means imparted, with the collaboration of Alberto Salván of three graphic types, in the graphic design and setting in space.
In the exhibition you can also see works on the wall, and works of great beauty, generously loaned by some of the authors of the chosen books: De Middel, Barón, Meeks, Clavarino, Keppel, Van der Molen, Ortiz and a video on the case of the work Matter/Burn out, by Daisuke Yokota.
This is the list of books exhibited in the exhibition:
CINEMA
The last days seen of the king / Julián Barón, by Arantza Santesteban.
Unnamed road/ Jungjin Lee, by Maddi Barber.
Rasen Kaigan/ Lieko Shiga, by Oskar Alegria.
Raised by wolves/ Jim Goldberg, by Koldo Almandoz.
By Jon Cazenave:
Red Flower-The women of Okinawa/ Mao Ishikawa.
Hustlers/Philip-Lorca Dicorcia
The great unreal / Taiyo Onorato & Nico Krebs
At 8 in the bar Eusebi/Salvi Danés.
Funeral Train/ Paul Fusco
So it goes/ Miho Kajioka
MUSIC
Sequester/ Awoiska van der Molen, by Judith Jáuregui
Flat finish/ Stephan Keppel, by Ramon Lazcano.
Matter. Burn out / Daisuke Yokota, by Anari Alberdi.
Hanon/Yoshinori Mizutani, by Pello Ramirez.
By Jon Cazenave:
Hellsinki / Eloi Gimeno.
Gaudí. Intimate Impressions/Aitor Ortiz
Cry of an echo/ Malgorzata Stankiewicz
End of an Age / Paul Graham
Utatane/ Rinko Kawauchi.
Umbra/Viviane Sassen.
Literature
Party/ Cristina de Middel, by Miren Agur Meabe.
Halfstory Halflife/ Raymond Meeks, by Karmele Jaio.
Italy Or Italy/ Federico Clavarino, by Harkaitz Cano.
It seems that…/ Sophie Calle, by Eider Rodriguez.
By Jon Cazenave:
Elizabeth. I want to eat/ Mariken Wessels.
On abortion/ Laia Abril.
In this dark wood / Elisabeth Tonnard.
Looking for my father/ Natalya Reznik.
Postcards from home/ Roc Herms.
Small things in silence/ Yamamoto Masao.
This selection, like the rest of the collection, is varied and international (the Japanese always win, but I discover that there are many Dutch names). In it you will find very recent books and others already classics, some well known and others by perhaps less obvious authors, but no less pertinent. No rabid news has been sought, but On Abortion by Laia Abril is proof that photobooks deal with issues that are challenges of the world around us, unfortunately in this case.
Many books could have been chosen, so many come to mind right now, that would fit perfectly in this exhibition! Hopefully these, indisputable in my opinion, arouse interest and curiosity to approach them with a new look. My implication in depositing the collection in the San Telmo museum has always been to work for greater knowledge of the photobook, its in-depth study, its accessibility.
When I see the Laboratory room, full of light, converted into a fluid and clear study room, with easy and subtle circulation thanks to its colored signage, I think that this exhibition, humble by the means used but ambitious in its concept and content, achieves my expectations. I want to thank Jon Cazenave for his involvement and tireless dedication over the months to achieve this result, and the San Telmo Museum for making it possible. The sample will be visible until October 30, with free admission. Hopefully it can circulate later to reach more people!
I am also especially excited to have an 88-page catalog in the form of a newsprint, which includes all the texts in 4 languages (Basque, Spanish, French and English) as well as information about the books. You already know about my love for paper, and why there is a physical trace of this work…
For those of you who cannot go to the museum, you can download the publication from its website, here.
There will be guided tours and workshops associated with the exhibition, all the information on the museum’s website.
Emak Bakia, de Lander Rezola, Cuaderno de la Kursala nº86.
Fotografías, Lander Rezola.
Texto, La medida justa del oxígeno, Lara Moreno. Traducción Katie Whittemore.
Diseño underbau
Preimpresión, La Troupe. Impresión Brizzolis.
Publicado con motivo de la exposición «Emak Bakia» de Lander Rezola en la sala Kursala de la Universidad de Cádiz, comisariada por Jesús Micó. 2021
Llegó por fin Emak Bakia a casa, un objeto elegante y muy cuidado. Un libro preso de su estuche gris pero aflorando, como queriendo escapar.
Recuerdo las conversaciones en la biblioteca de San Telmo con Lander sobre como quería que fuera su libro, la encuadernación, el tamaño, el papel. Creo que estará muy satisfecho a la vista del resultado. Emak Bakia es un objeto sensible y delicado, a pesar de su aparentemente sólida cubierta.
La vulnerabilidad aflora de este libro, de su papel y tinta febríl. De entre el espacio inquietante, el aire enrarecido, las paredes que nos encarcelan. Emak Bakia es un grito sordo, un sonido apenas perceptible que acabamos identificando como el latido del corazón del autor.
«En su justa medida es la medida justa del oxígeno no quiero decir hipoxia cerebral ni enfisema en esta mañana casi fría como una traición que suena a ser cobarde o suena a alquitrán a nada sirve…»(Lara Moreno).
Escaso refugio es el hogar y sus límites cuando estos solo son el espejo que nos impide ver y nos retiene, desprovistos y solitarios, sin aliento y ciegos ante la belleza más allá de esos muros. La vraie vie est ailleurs dijo el poeta. La fotografía tiene quizá ese poder, el de dar voz al silencio, retratar el miedo, darle un cuerpo y nombrarlo. Romper muros y deshacer el miedo. En este caso lo tiene, y bello es este camino.
Emak Bakia ha visto el día, ha respirado el aire fuera de esos muros venenosos, ha sido objeto de una exposición en la Kursala de Cádiz. Zorionak, Lander, espero verte pronto en San Telmo de nuevo con tu libro, el nuestro.
Hacer una lista, inexorablemente. Llega esa época del año en la que empiezas a oir hablar de listas de libros y piensas en todos los que han pasado entre tus manos y han dejado huella por alguna razón. A estas alturas no sé cuales son los «mejores» libros del año. Es bastante difícil recordar fechas y nombres de todos, no llevo bien las cuentas… He visto muchos, pero cada vez me resulta más difícil hacer valoraciones o clasificaciones. Será que me hago mayor, o he visto demasiados.
El año 2021 ha sido extraño y duro. A pesar de las apariencias ( esta lista es muy larga una vez más), he comprado por mi parte bastante menos libros. La ansiedad por verlo todo es menor, y hay que aceptar las limitaciones. Pero a pesar de las dificultades la curiosidad sigue intacta, la emoción también. Puede que falten en la colección y aquí libros importantes, espero que no los imprescindibles. Quedan libros por llegar a la vuelta de Paris Photo, no descarto reactualizar la lista.
Como es habitual, esta selección es variada y muy personal. Hay libros de muchas procedencias y estilos. Nunca hay suficientes libros de mujeres o de autores no occidentales, lo reconozco y lamento. Los hay baratos, caros, y muy caros, como es el caso del de Gilles Peress… Hay alguno único, otros en ediciones muy cortas o ya agotados. Otros muchos siguen disponibles a la venta, os animo a buscarlos. Algunos enlaces llevan a librerías independientes, otros al propio editor o al autor. Es imposible hacer un comentario de todos, aunque de algunos ya he hablado en las redes o enseñado fotos. La mayoría esta ya en la biblioteca del Museo San Telmo, el resto llegará muy próximamente. Seguro que me olvido de muchos, pero en algún momento hay que cerrar la lista …
Gracias a todos por leerme por aquí, espero veros en algún momento fuera de la vida virtual. Seguimos en San Telmo para toda/o el que quiera acercarse!!!
Recién llegada y apenas vaciada la maleta me pongo a escribir estas primeras impresiones. Poder haber ido a París ya es motivo de fiesta y celebración, después de lo vivido durante casi 2 años. Seguramente todos los presentes allí habremos sentido lo mismo.
Así, desembarcar del tren y llegar a bordo del Concorde Atlantique ha sido muy emocionante, aún con mascarilla y cierta prudencia y cautela de mi parte.
El viaje a París en noviembre significa encontrarse con aquellos que compartimos el amor por el fotolibro y la fotografía, una familia variopinta con parientes cercanos y otros lejanos. Esta familia va agrandándose con los años, aunque inevitablemente no puedan estar todos sus miembros en Paris Photo. Amigos autores, editores, libreros o coleccionistas, todos intentamos encontrarnos allí. Y ver libros y buena fotografía.
Esta edición no ha fallado, y París estaba preciosa, con sol o cielo gris. Pero había cambios. El Palais Ephemère, enorme carpa de lujo detrás de la torre Eiffel, albergaba la flor y nata de las galerias internacionales con sus mejores galas, mientras en el Grand Palais se restaura la enorme vidriera y sus oros. Offprint, habitualmente en la gran sala de la Ecole des Beaux Arts, proponía este año un recorrido entre varios espacios. Muy atractivo, pero que en la realidad, por lo menos para mi, ha resultado imposible. Demasiado que ver, demasiado poco tiempo. Horarios incompatibles, actividades multiples, trayectos largos, París es también renunciar, desgraciadamente. Intento combatir mi estado de ansiedad por no poder ver todo, este año creo que lo he logrado, aún sabiendo que han quedado muchas cosas lejos de mi vista. Tant pis!
Paris Photo también es el off, con Photo Saint Germain, el Salon Approche con sus 15 galerías, el salon Vintage, con visita obligada a los amigos Clément, del Plac’Art, y Claude Lemaire de L’Ascenseur Végétal. Además de innumerables exposiciones en Beaubourg, Fondation Cartier-Bresson, la MEP, o la recién estrenada Bourse du Commerce, con la colección Pinault. De las charlas en el Palais solo he podido escuchar una y brievemente desgraciadamente, sobre la presencia de las mujeres en el fotolibro, a la vez que se daban los premios Aperture al mejor fotolibro del año en un pasillo abarrotado. Los premios de este año, que anuncié mal en facebook, por los nervios y el ambiente ruidoso, han sido estos:
Estos dos últimos se van a poder ver muy próximamente en San Telmo. No conocía los dos otros, lo reconozco. The Banda Journal todavía no está distribuido fuera de Indonesia…
No se pueden tener todos los libros, y yo me hago mayor. Tendré que ser más selectiva. Quizá no sea el mismo entusiasmo, a pesar de conservar la misma curiosidad. He visto muchos libros este año, en mi opinión personal algunos muy buenos, pocos extraordinarios, bastantes ya conocidos. La crisis del Covid ha provocado penuria del papel, subidas de precio, retrasos en la impresión, dificultades para todo el sector. Pero tanto en el Palais como en el barco he visto mucho público y espero que las ventas hayan sido buenas para todos.
Henri Fox Talbot
Anna Atkins
Sigmar Polke
Miho Kajioka
Chris Killip
Alison Rossiter
L’image et son double, Beaubourg
Leslie Martin anuncia los premios
Ackerman en Jeu de Paume
Sin querer hacer aquí un listado largo de nombres, diré que es una fiesta ver a Montse e Israel de Anómalas, a Sonia y todo el equipo de Dalpine, a Jon Cazenave firmar por fin Galerna en Paris! A Andrea Copetti del Tipi, a los chicos de Phree, a Hannah Darabi, Miguel Leache, Yumi Goto, Thibault Tourmente, Paula Anta, Russet Lederman, David Solo, Christer Ek, Daria Tuminas, Rui Ribeiral, a Anna Planas de Delpire … Escuchar con un nudo en la garganta a Michael Ackerman en su video sobre su hija en el Jeu de Paume, charlar con Gabrielle Duplantier y Stephane Charpentier, conocer por fin a Miri Rosen! Compartir tiempo con Patrick Maille, y que Raymond Meeks se vaya con un ejemplar de Novis Corpus después de un desayuno conjunto…
Josef Albers, Musée d’Art Moderne
Josef Albers
Thibault Tourmente, galerie P38
Thibault Tourmente, Inventaire déraisonné.
Gregoire Eloi, Approche
Susan Meiselas, Beaubourg
RM
Diane Arbus
Mark Mahaney, en Kominek
Almudena Romero
Todo eso no tiene precio, y es energía para los meses de invierno. Hacer planes para San Telmo y soñar en lo que podría llegar. París es una fiesta, traer una maleta de libros es traer un poco de la fiesta aquí .
No ha acabado el año, en breve vendrá a San Telmo Laura Carrascosa Vela. Llegarán las listas de mejores del año y los balances de 2021. Y más libros. Seguimos!
Empieza el otoño, después de un verano raro. Creo que ya a nadie se le escapa que Raymond Meeks es uno de mis autores favoritos, que hace que me acerque aquí de nuevo a escribir.
En realidad este trabajo se había publicado con anterioridad por el propio Meeks en su editorial Dumbsaint, bajo el nombre Pretty girls wander, en 2011, en una edición de 40 ejemplares.
Es una suerte que trabajos poco divulgados, ya que publicados en orígen en tiradas muy cortas vuelvan a ver la luz de la mano de Mack en este caso.
Los libros autoeditados de Meeks son dificilmente reproducibles, joyas hechas a mano con copias originales. Sin embargo estas reediciones, muy cuidadas por Mack y el propio autor, son una fantástica oportunidad de conocer y divulgar la obra de Meeks. Además, como fue en el caso de la edición especial de Ciprian Honey Cathedral, este nuevo libro también tendrá su edición limitada con un cuaderno añadido hecho a mano por el propio Raymond Meeks. Un suplemento que bien vale la pena para quien conoce y ama el trabajo del autor.
Somersault / Pretty girls wander es un trabajo muy personal y familiar e íntimo. El autor, ayudado aquí por su hijo, Adam Meeks ( dos veces aparece la mención «made with Adam Meeks») retrata el momento en que su hija Abigail se hace adulta, a punto de dejar el domicilio familiar para estudiar y crear su propia vida lejos de casa e independizarse. El lugar donde uno siente la pertenencia, (no encuentro palabra exacta para lo que los anglosajones llaman a sense of place), el arraigo, son temas muy tratados por Meeks. Diría que son puntos centrales de su obra, una y otra vez. La manera en que crecemos o vivimos moviéndonos en un espacio que hacemos nuestro de manera imperceptible, para bien o para mal, incluso a nuestro pesar, la huella que dejamos en las cosas que nos rodean, el aire que respiramos. Ese espacio es el que retrata aquí Raymond Meeks, el que ha acompañado a su hija en su infancia hasta este momento en que ya está a punto de dejarlo. Ese espacio recoge la mirada de su hija, en ese momento delicado de su vida, sus dudas y temores ante lo que le espera. Somersault, una voltereta, retrata también la evidencia de la juventud, la ternura de su sonrisa , la magia de su presencia, el dolor de su ausencia.
El salto es tanto para la hija como para el padre, desarmado ante la ida ineluctable, buscando en el espacio que les une y les separa el misterio inabarcable que es su hija. No hay nostalgia aquí ni tristeza, si mucha delicadeza y la evidencia de la fragilidad, la de los seres que somos y amamos, la del tiempo que corre, la de los lugares que habitamos. Son fotografías con risas y muchos silencios, poéticas y misteriosas, secretos intuidos. Nada es para siempre, las casas pueden desplazarse, las vigas del ferrocarril están invadidas por las hierbas, los jardines se transforman bajo el efecto del tiempo y la luz maravillosa que Meeks atrapa con tanta delicadeza, tanto en color como en blanco y negro. Somersault es un objeto sensible, perfecto en su formato y tacto, cálido y elegante, íntimo y misterioso.
La profunda emoción que me procuran estas fotografías, más allá de ser tan bellas y frágiles, sigue siendo un gran misterio para mi. Será el recuerdo de la infancia, el refugio de las horas en el jardín, el olor de las rosas o de los manzanos, la ausencia de algunos seres. No le busco más el porqué o una explicación a la conexión inmediata y duradera que siento, y que me deja desarmada y sin palabras. Pienso en el tacto de una caricia sobre una vieja cicatriz, algo parecido al efecto de algunas músicas sobre el alma, las barricadas misteriosas que nos protegen de nosotros mismos.
Somersault, Raymond Meeks
Mack Books, 2021. Primera edición, firmada.
17×24,5cm. 72 paginas. Blanco y negro y color
Tapa dura. Texto, Raymond Meeks y Abigail Meeks.
Diseño Raymond Meeks, Adam Meeks y Morgan Crowcroft-Brown.
Impreso en Italia.
Somersault estará muy pronto en la biblioteca del Museo San Telmo con el resto de la colección. Conservo en casa libros y ediciones especiales de Meeks hechas a mano, menos alguna presente en el museo. Si alguien desea verlas, que me lo diga, las enseñaré encantada.
Ayer tuvo lugar en el marco impresionante de la iglesia del Museo San Telmo un photobookjockey sobre fotografía japonesa, de la mano de Juan Cires, gran especialista de esta. Juan conoce la fotografía japonesa como (casi) nadie, y en especial su vertiente de fotolibro.
Poder disfrutar de su presencia ayer en la iglesia fue un lujo. Dansu, dansu, dansu resultó ser una suerte de «performance», mezclando imagen, película, sonido y libros, además de lectura de textos.
Japón es un mundo aparte, y como dijo Juan, adentrarse en su cultura es para un foráneo como encontrarse en Marte. Él nos llevó de la mano por su historia , sus tradiciones, por los rincones ocultos de su geografía física o sentimental, todo representado en los libros. Parte de esos eran de la colección de Juan, un tesoro bien guardado que él nos quiso compartir, y la otra parte provenían de la colección depositada en San Telmo, más contemporánea. De esta manera, cualquier representación de Dansu, dansu, dansu es única, aunque Juan ya la haya mostrado en dos ocasiones, en Madrid y Granada.
Los fotolibros japoneses son un mundo especial dentro de los fotolibros, tan arraigado está este medio de expresión dentro de la fotografía japonesa. Esta no se entendería sin el libro, su vía natural de comunicación, casi de existencia.
Ryuichi Kaneko, gran historiador de la fotografía japonesa, gran coleccionista, y participante a su vez a la exposición Fenómeno Fotolibro, murió el pasado mes de julio, y este bookjockey era también un homenaje a su persona, la que más ha obrado para dar a conocer el fotolibro japonés en el mundo entero.
Dansu, dansu, dansu saca su nombre de una novela de Haruki Murakami, y Juan recoge la idea del baile ( dance), para crear una coreografía de imágenes y sonido que van del Butō tradicional a la más feroz experimentación.
Aquí os dejo la lista completa de libros mostrados, por orden de aparición:
Espero se alargue la lista. Desde aquí, mil gracias a Juan Cires y a San Telmo por la organización.
#spreadtheloveofphotobooks
#YELNUESTROCUÁNDO
El 26 de mayo de 2021, hace unos pocos días, se presentó al público la Plataforma Centro de Fotografía e imagen, en una rueda de prensa retransmitida en directo desde el Circulo de Bellas Artes de Madrid. La plataforma, presidida por Juan Manuel Castro Prieto, premio nacional de fotografía, agrupa un gran número de fotografos, comisarios, galeristas, periodistas, actores vinculados de cerca o lejos a la comunidad fotográfica en España.
Con el respaldo de los 17 premios nacionales vivos, con un logotipo inspirado en una fotografía icónica de Ramon Masats diseñado por Pollobarba, la Plataforma ha lanzado su Manifiesto para la creación de un Centro de Fotografía e imagen, reclamando la necesidad de una casa de todas y todos, abierta y dinámica, un lugar donde guardar el patrimonio y archivos, fomentar la educación, apoyar a los fotógrafos, mostrar todas las corrientes , abordar desde una casa común los retos de la sociedad bajo el prisma de la imagen. Este proyecto no es nuevo, desde hace años se ha intentado abrir cauces de comunicación con las instituciones para avanzar en su realización, con poco éxito.
Como dijeron los portavoces de la plataforma ese día, el ya mencionado Castro Prieto acompañado de Sandra Maunac, comisaria, Nerea Ubieto, gestora cultural, Alejandro Castellote, comisario, ya no es tiempo de esperar si no de trabajar conjuntamente, reunir e integrar la gran familia de la fotografía en España.
Desde mi posición de coleccionista de fotolibros, colaboradora de una institución como es el Museo San Telmo, creo muy necesaria la creación de este centro público, algo que ya existe en muchos países vecinos que apoyan firmemente la fotografía como Francia por ejemplo. Trabajar con el archivo, conservar un patrimonio, formar y divulgar son también los objetivos de la colección. He tenido la suerte de participar a la comisión creadora del Manifiesto y de seguir de muy cerca los primeros pasos de la plataforma. Desde aquí solo puedo apoyar esta iniciativa y difundir su mensaje, así como animaros a todas y todos a firmar este Manifiesto, si os sentis miembros de esta gran familia. Ya más de 5700 personas han aportado su apoyo.
No hace falta ser profesional , solo tener en comun el deseo de ver por fin realizado un centro público, un espacio abierto e integrador, para amar, guardar y difundir la fotografía. Si queremos conseguirlo será entre todos , apoyando este iniciativa. Únete !!!